Estudiante fue víctima de un espíritu maligno

Imagen de la entrada del colegio colombiano donde ocurrieron los hechos.

Neiva (Colombia).- La menor se encontraba en el tiempo de descanso, cuando empezó a comportarse de manera extraña.

Ayer la tranquila hora del descanso de los alumnos de la Institución educativa Jairo Morera Lizcano jornada de la mañana, se vio interrumpida por un hecho que generó pánico a docentes y estudiantes.

Una de las alumnas fue víctima al parecer de un espíritu maligno que provocaba que la menor de 14 años de edad, empezara a comportarse de manera extraña y a decir cosas escalofriantes.

Todo inició cuando varios de los estudiantes de primaria y bachillerato disfrutaban de un animado partido de fútbol y una gritería llamó la atención del público, quienes de inmediato fijaron su mirada al lugar de donde provenían esas voces.

Compañeros de la jovencita trataron de calmarla sin obtener algún resultado, debido a que la fuerza que ejercía era superior y comparada a la de un hombre muy fuerte, según lo aseguraron algunos testigos.

«Ella empezó a moverse fuertemente como si estuviera electrocutada, se tiró al suelo, se movía mucho, los brazos y sus piernas las utilizaba como mecanismo de defensa contra los que queríamos ayudarla y colocaba una voz gruesa como de una demonio, diciendo cosas como en otro idioma; era realmente horrible», señaló uno de los estudiantes.

Los maestros decidieron llevar a la jovencita a la oficina de coordinación en donde empezaron a buscar mecanismos para poder controlarla, llamaron a sacerdotes para poder liberarla de ese presunto ser extraño que se había apoderado de la menor.

«Pedía que no le oraran»

La mayoría de los docentes se centraron en ayudar a la joven que con una fuerza sobrenatural para una niña de su edad, no podía ser controlada por 12 personas que sostenían fuertemente su cuerpo y manos para que no se lastimara.

«Pude estar en contacto directo con la niña; estoy a cargo de la disciplina justamente hoy (ayer) y honestamente vi la niña a quien la tenían que sostener otras personas, me le acerqué, la tomé de las manos con fuerza y quedé sorprendido porque inicialmente empecé a hablarle con palabras dulces, cariñosas; en un momento invoqué a Dios y tan pronto lo hice la niña o mejor dicho el espíritu mostró violencia, hizo un gesto con su boca bastante despectivo y me escupió, levantó los brazos con una fuerza tan tenaz que me ganó, me enterró las uñas, me sacó sangre e intentó morderme en varias oportunidades y con una voz gruesa me pedía que no le invocara a Dios», señaló el docente Pablo Antonio Oviedo.

La comunidad estudiantil llamó de inmediato al padre adscrito a la parroquia del barrio Panorama quien se encontraba ocupado, por lo que le indicó al profesor Oviedo lo que debía hacer.

«Me dijo que tomara sal y agua bendita, que le hiciera la señal de la cruz con esos elementos en el contorno de la boca y le rezara el Credo; efectivamente empecé a hacerlo y créame que cuando lo hice quedé sorprendido porque el poder de la oración es muy grande, porque cada vez que orábamos el espíritu se violentaba», expresó el profesor.

A pesar de las medidas adoptadas por los preocupados espectadores del insólito hecho, la menor seguía exaltada y tratando de autoflagelarse. Minutos después llegó un padre quien logró calmarla tras un extenuante rito religioso.

Cada vez que el párroco invocaba a Dios y ordenaba al espíritu dejar el cuerpo de la adolescente, se escuchaba una risa escalofriante, una voz gruesa y fuerte que decía palabras en arameo y en español.

«La situación que se presenta lo invita a uno tanto como docente a reflexionar acerca del bien y el mal; de la presencia de Dios y la presencia del diablo. Siempre puse en duda la presencia del diablo porque Dios abarcaba mi conocimiento y eso no lo aceptaba, pero hoy comprobé que esa fuerza maligna sí existe», puntualizó Pablo Antonio Oviedo.

Ya había sido liberada dos veces

Según los señaló una persona cercana a la familia de la menor, meses atrás habían realizado unos rituales con el fin de que esos extraños episodios no volvieran a ocurrir.

«Esta situación a ella no la deja ni dormir; es un espíritu maligno que no la deja en paz a ella ni a sus dos hermanitos y a una cuñada. Se manejan dos versiones de por qué están poseídos; una es que una persona los está trabajando porque les tiene envidia y otra es que ellos retaron a los espíritus», aseguró el conocido.

Luego de que la jovencita volvió a la normalidad, contó que minutos antes la camándula (rosario) que usaba se había reventado extrañamente y que después pasó todo. Señaló que en esta ocasión sintió la presencia de una sola persona, porque hace aproximadamente un mes un hombre y una mujer se apoderaron de su cuerpo.

Fuente del artículo: http://www.diariodelhuila.com