
Nunca se ha explicado con exactitud, como la cultura sumeria-babilónica se levantó de la noche a la mañana y logró un grado de evolución realmente fascinante. Algunos estudiosos atribuyen el gran desarrollo de los Sumerios a su Dioses llamados Anunnakis (aquellos que vinieron de los cielos).
Con frecuencia estos dioses sumerios otorgaban a sus seguidores fuertes poderes mágicos como recompensa a su lealtad.
¿Qué es el Urushdaur?
Urushdaur significa arrojar el alma de una persona por medio de la sangre. Este ritual consiste en arrojar el alma de una persona de su cuerpo físico e instalarse en su lugar, mientras que el espíritu desalojado es enviado al inframundo.
El ritual del Urushdaur ha transcendido el paso del tiempo gracias a una esfera de terracota encontrada en la antigua ciudad de Eridu (actualmente lo que hoy conocemos como Irak). Expertos han datado a estas esferas con aproximadamente 12.000 años de antigüedad, fecha cercana a la gran inundación o también llamado Diluvio Universal.
Eridu o Eridú fue una antigua ciudad del sur de Mesopotamia, a 24 kilómetros al sur de Ur, en el actual yacimiento arqueológico de Tell Abu Shahrein. Según la tradición sumeria Eridu era la más antigua de las ciudades. Actualmente los arqueólogos la ubican con una antigüedad de 4900 a. C.
Para los sumerios Eridu era un lugar importante porque fue allí donde la realeza “descendió del cielo” y fue el primer asentamiento sobre el que se instituyo un estado centralizado.
La princesa Narfater
Cuenta la historia, que la princesa Nafarter, había nacido con un cuerpo deforme. Su padre desesperado realizo un trato macabro con la sacerdotisa de Ur. Los sacerdotes junto con la sacerdotisa darían un nuevo cuerpo a su hija y a cambios ellos recibirían un templo central y un papel político central en el reino.
Es así que la princesa Narfarter, recibió el cuerpo de una niña sana y su ser vivió para siempre en su nuevo cuerpo.
Los postulantes al Urushdaur
Los postulantes sometidos al Urushdaur, entraban al templo aproximadamente seis meses antes y eran sometidos a durísimas pruebas. Así los sacerdotes determinaban si los postulantes tenían lo que daban en llamar un “Espíritu Transportable”.
Cuando el aspirante era considerado apto, al siguiente año sufriría la denominada «inmersión», en este proceso habría de someterse a un exigente tratamiento preparatorio, con el objetivo principal de separar el alma del cuerpo del aspirante para preparar su inserción en otro cuerpo.
Este tratamiento implica el sometimiento a complejas técnicas corporales y mentales, entre ellas la absoluta obediencia y entrega al dios encarnado en el Mago, el ofrecimiento de dos sacrificios humanos, y una serie de sacrificios económicos.
Las víctimas
Las víctimas eran cuidadosamente seleccionadas y secuestradas de su lugar natal. Muchas veces eran raptadas de sus padres y privadas de su libertad, viviendo en el templo junto con los sacerdotes para garantizar el buen estado físico, hasta que se realice la posesión.
La edad ideal de las víctimas era entre los 8 y 14 años. No se elegían niños menores ya que aumentaba la posibilidad de que estos perezcan durante la ceremonia. Si los niños tenían más de 14 años y las niñas más de 21 el ritual corría peligro de no funcionar.
El ritual del Urushdaur propiamente dicho, podía durar varios días, dependiendo de la resistencia del espíritu del donante a abandonar el cuerpo físico. El alma de la víctima era extraída y guardada en un recipiente, cediendo así el cuerpo al aspirante, cuyo cuerpo fallecía en el proceso.
El cuerpo del aspirante era desechado dentro del templo, sin su alma. El alma del donante se conservaba en un lugar secreto, donde solamente tenía acceso el sumo sacerdote, quien había adquirido el conocimiento de las deidades sumerias.
Si por algún motivo el recipiente con el alma se rompía esta quedaría libre, y aparecería como fantasma a reclamar su cuerpo.
¿En que casos se practicaba el rito del Urushdaur?
Según se cree el ritual de posesión se realizaba ante cuatro objetivos determinados, los cuales mencionamos a continuación:
El primero de ellos, era el de “escaparse de enfermedades físicas”, como ser malformaciones. Dejando el propio cuerpo para ingresar en uno sano. Este caso sería el de la princesa Narfater.
También se cree que el Urushdaur, podría haberse usado para cambiar el espíritu de algún guerrero capturado, introduciendo un espíritu de confianza para que se infiltre en las filas enemigas.
Otros creen que esta práctica se implementaban para “implantar” un aspirante ilegitimo al trono, de esta manera un supuesto aspirante ilegitimo podía ocupar el lugar del príncipe o rey legítimo.
Por último, la técnica de usurpación de cuerpos podía ser usada por los dioses, para materializarse y tomar forma humana.
Tasa de éxito del proceso
Una de las tablillas revela que el Urushdaur tenía éxito en:
40 de cada 60 niños pequeños, 30 de cada 60 niños mayores, 25 de cada 60 adolescentes, 12 de cada 60 jóvenes, 3 de cada 60 personas maduras, y en 1 de cada 60 ancianos.
Las diferencias de edades obedecen al grado de fijación del alma al cuerpo que, también en el aspirante, es mayor mientras más viejo se es.
Ciertos estudiosos entusiastas del ocultismo y de técnicas de posesión creen que el Urushdaur, es la técnica usada para que entidades etéreas desconocidas puedan manifestarse de carne y hueso, y así infiltrarse y ejercer roles preponderantes dentro de las estructuras de poder.
Sacrificar niños era algo muy extendido en las culturas antiguas
En Cartago había un pozo de sacrificio de fuego, en el que eran lanzados niños con sus padres. Mientras que en las grandes catástrofes como la sequía, el hambre o la guerra, los sacerdotes exigían que incluso los jóvenes fueran sacrificados. El ritual se llevaba a cabo en una noche iluminada por la luna, las víctimas morían rápidamente, y sus cuerpos eran arrojados a la fosa de fuego, y todo esto acompañado por cantos de júbilo y baile.
Los Incas sacrificaban a los niños en honor a sus dioses, Los sacrificios humanos también se practicaron en la antigua China. Se han encontrado registros en los que la Dinastía Shang practicó los rituales con frecuencia para adorar a los espíritus.
En el Antiguo Testamento se menciona como en la Antigua Babilonia se realizaban sacrificios a Baal (Saturno), ofreciendo pequeños niños para calmar la sed de sangre de los “Dioses”.
Reflexión Final
No cabe duda que en la antigüedad se ofrecía el sacrificio humano a los Dioses, estos hechos fueron narrados en diferentes culturas. Lo que más llama la atención, es como una cultura primitiva (según la historia oficial), hace unos 7000 años de nuestros días se dedicaba a dejar grabado en la piedra indicaciones precisas de cómo lograr la implantación de espíritus en diferentes cuerpos.
Me pongo a pensar y no encuentro explicación. ¿Eran unos grandes fabuladores? ¿Sabían que era el espíritu, el alma y el cuerpo físico? ¿Manejaban los términos reencarnación, posesión de cuerpos, inframundo, fantasmas?
Creo sinceramente que nos hemos perdido una gran parte de nuestra historia. Porque me es imposible pensar que lo que fue catalogada como la primera civilización humana, maneje términos, técnicas y conocimiento casi imposibles para el grado de entendimiento que creemos tener de ellos.
Cesar Bugari