Duendes ¿»mágicos»?

Igual a algunos/as les molesta o fastidia lo que voy a decir, pero…tengo que decirlo.
¿No se han preguntado qué hay realmente detrás de esos ‘peluches de duendes’ que cada vez que se acercan las fiestas navideñas, en Chile llegan a provocar ataques de histeria y auténticas peleas en los comercios para hacerse con uno?
No diré nada aquí, aunque lo rechazo de lleno, sobre el exacerbado consumismo navideño. Lo que quiero es hacer referencia a un aspecto muy preocupante de esos «juguetitos». Copio literal del periódico La Cuarta:
«En varios colegios del país los niños tienen permiso para llevar sus duendes mágicos y jugar con ellos en el recreo, pero durante las horas de clases deben estar guardados porque los pequeños estudiantes están pendientes todo el rato de los muñecos y su fama de moverse solos».
«¿Fama de moverse solos?» ¿De qué estamos realmente hablando? ¿De simples peluches, o de algo mucho más extraño… y peligroso?
Porque con los duendes, y con cualquier otra criatura sobrenatural, es peligroso jugar.
Si tienen ustedes alguna experiencia o testimonio sobre esos «juguetes», la leeré con gusto.