En este video, la recitación del Corán hace que un espíritu (o djinn) salga del cuerpo de un hombre musulmán, aparentemente poseído. Una evidente prueba de que el exorcismo no es exclusividad de la Iglesia católica, y de que las posesiones espirituales (o demoniacas) se producen en todas las religiones y en todas las culturas.